Hoy llega al pais una delegación del FMI. El Gobierno pedirá un acuerdo de facilidades extendidas que implica mas ajuste estructural: mayores condicionamientos y el anunció de la fórmula de movilidad, que perjudica a los jubilados.
10 de noviembre de 2020 | 12:27
Por Brian Cienfuegos.
Este martes llega una nueva misión del Fondo Monetario Internacional (FMI) para comenzar las negociaciones por la deuda contraída bajo el macrismo. Argentina buscará en las próximas negociaciones con el Fondo Monetario Internacional (FMI) un programa de facilidades extendidas para renegociar su deuda por unos 44.000 millones de dólares, acordada en 2018, según señaló el ministro de Economía, Martín Guzmán, a medios extranjeros.
"El programa de facilidades extendidas da un periodo de repago del capital en cuotas entre el año 4 y medio y el año 10″, sostuvo Guzmán, quién insistió en que espera llegar a un acuerdo antes de abril venidero. Agregó que “el personal del FMI y el Gobierno argentino considera que en las circunstancias actuales, ese tipo de programa es la mejor alternativa disponible”, según informó Bloomberg.
Los funcionarios Julie Kozack y Luis Cubeddu encabezarán las negociaciones con el Gobierno del presidente Alberto Fernández. La Argentina quiere renegociar el crédito que firmó el país en 2018 con el organismo multilateral por unos USD 57.000 millones, de los cuales USD 44.000 millones ya fueron desembolsados.
Un acuerdo de facilidades extendidas “es un resultado que va en la línea de generar más estabilidad en el frente cambiarlo y también de fortalecer el mercado de deuda pública y de instrumentos de financiamiento en general en pesos”, afirmó Guzmán.
Mas ajuste y deuda para pagar la deuda
Hoy llega el FMI, y para recibirlo, el ministro de economía Guzmán anunció a las agencias internacionales Bloomberg y Reuters que busca alcanzar a un acuerdo de Facilidades Extendidas (EFF por su sigla en inglés). Este acuerdo está pensado para países "con graves problemas de balanza de pagos por deficiencias estructurales o lento crecimiento y una situación de balanza de pagos muy debilitada".
El periodista Alejandro Bercovich, publico un hilo en Twitter explicando el EFF, y menciono que “El acuerdo de facilidades extendidas (EFF) de 1992 (Cavallo) fue por USD 3.604 millones. El de 1998 (Roque Fernández) fue por otros USD 2.080, que el gobierno se comprometió a no utilizar. Los dos aceptaron fuertes condicionalidades. Ambos terminaron con más deuda, claro.”
El objetivo de los programas EFF es permitir refinanciar las deudas a un plazo mayor que los standby (SBA), de hasta 10 años, a los paises que lo piden. Pero como todo acuerdo con el FMI, a cambio, el país se sujeta a una suerte de tutelaje que no solo incluye metas cuantitativas sino también medidas concretas para alcanzarlas.
Y las primeras políticas de ajustes para contentar al FMI no tardaron en llegar. El Gobierno hizo público un nuevo mecanismo de la movilidad de jubilaciones y pensiones. La nueva fórmula, que presentará el Frente de Todos en el Congreso, implicará que los ajustes futuros se hagan sobre una combinación entre el cálculo de la suba de los salarios (50%) y la suba de la recaudación (50 %). Este método de ajuste, que volvería a realizarse cada 6 meses, estuvo vigente entre 2008 y 2017. Mientras los precios se aceleran, el Gobierno intenta desindexar los haberes de la inflación.
Este no es el primer síntoma de profundización del ajuste sobre los jubilados. Ya a principios de año, el gobierno anuncio la suspensión de la movilidad en un recorte estimado es de $72.000 millones, según el IARAF (Instituto Argentino de Análisis Fiscal).
Para completar, el ministro de Economía, Martín Guzmán, anunció este lunes el envío al Congreso Nacional de un Proyecto de Ley para fortalecer la sostenibilidad de la deuda pública, en el que se propone que los préstamos en divisas extranjeras deban tener previamente la aprobación del Parlamento, así como también los programas que se negocien con el Fondo Monetario Internacional. De esta manera buscan asegurarse de repartir los costos políticos del nuevo saqueo.
Fuera el FMI
El gobierno decide endeudarse para pagar la deuda. Esta política no resuelve el problema, sólo extiende los plazos de pago al mismo tiempo que las exigencias de reformas y ajuste aumentarán las penurias del pueblo trabajador. La determinación de las ofrendas realizadas por Guzmán para convencer al Fondo no sólo muestran un salto en la entrega, también demuestran que el plan económico del gobierno "progresista" es ajuste y saqueo a la clase trabajadora. Un saqueo de recursos que profundizan el atraso y la dependencia.
Como en 2018, es necesario que el pueblo rechace la presencia del FMI, y exija al gobierno que priorice los derechos de las y los trabajadores, en lugar de hipotecar el futuro con mas emisión de deuda y ajustes estructurales.