El Tribunal Constitucional de la dictadura boliviana aprobó este miércoles la prorroga del mandato para el Gobierno golpista de Jeanine Áñez, que debía terminar a fin de enero, hasta que se realicen las próximas elecciones programadas en principio para el 3 de mayo.
Este miércoles 15 de enero el Tribunal Constitucional Plurinacional (TCP) de Bolivia aprobó la constitucionalidad del proyecto de "Ley Excepcional de Prórroga del Mandato Constitucional" de la presidenta de facto Jeanine Áñez, de los asambleístas nacionales, gobernadores y asambleístas departamentales.
Ahora la Asamblea Legislativa Plurinacional deberá aprobar este proyecto para culminar la prórroga de mandato de las autoridades señaladas.
Por su parte, la ONU aprobó la decisión del gobierno golpista, y en palabras de su enviado, Jean Arnault, señaló que la decisión “está en plena armonía con el gran consenso nacional sobre la necesaria electoralización del país como única vía legítima” para superar la crisis abierta luego de las elecciones generales de octubre del 2019.
A pesar de que la medida es polemica, los sectores más radicalizados de la derecha no estan a gusto con la resolución del TCP, ya que que querían ir mucho más allá. Son los casos de la Conade (Consejo Nacional de Defensa de la Democracia) y otros grupos filo fascistas como la UJC (Unión Juvenil Cruceñista) y la RJC (Resistencia Juvenil Cochala), que le exigen al TCP el cierre de la Asamblea Legislativa Plurinacional para que la golpista Jeanine Áñez pueda gobernar mediante decretos y evitar pasar por el Parlamento con mayoría masista.
Aun así, la resolución del TCP, le permite a la dictadura de Añez mantener la continuidad de su Gobierno sin alterar los marcos de la democracia representativa y uno de sus pilares como es la división de poderes, y expresa una vez más la voluntad colaboracionista tanto del Poder Judicial como de las y los parlamentarios del MAS, que poco pueden hacer si no quieren quedar fuera de la legalidad, en la consolidación del nuevo esquema de Gobierno.
Mientras tanto, Evo Morales sigue denunciando, desde Argentina, que en su país se vive un escenario de represión y de persecución política descomunal, que dejó cientos de heridos y 38 familias de luto que hasta el día de hoy no encuentran justicia por el decreto 4078 (hoy abrogado) que garantizó la impunidad a los militares por la represión durante las masacres de Sacaba, Senkata y Ovejuyo.
En cuanto a los detenidos, se informan que hay alrededor de 150, la mayoría procesados con acusaciones de sedición y terrorismo mientras. Además casi 600 ex funcionarios de distintos niveles del ex gobierno del MAS están siendo investigados y se les están inventando causas. Y el régimen de Áñez a no se conforma y también ataca a la libertad de expresión y de prensa. Ya mas de 50 radios comunitarias han sido silenciadas y a través de medidas de “rastrillaje cibernético” se atemoriza y se acosa las publicaciones opositoras al régimen en redes sociales. Tal es el caso que podemos ver la cuenta de Adrián a Salvatierra, senadora del MAS, en privado, para evitar la persecución, y lo mismo ocurre con la cuenta de Generación Evo, juventud del MAS.
Y para completar, Añaz complementa la gravedad con la crisis diplomática con México y España abierta días atrás para impedir la salida del país de altos ex funcionarios hoy asilados en la embajada mexicana. Y por supuesto, la detención del ex ministro de Gobierno y las órdenes de captura contra Evo Morales sumado a los intentos de silenciar sus declaraciones y la acusación al gobierno de Alberto Fernández de colaborar con el "terrorismo", completan el postre de la dictadura.
En Bolivia continúan las marchas y protestas, exigiendo por la libertad de todos las y los presos políticos y el cese de la campaña de persecución contra militantes y simpatizantes del MAS y demas organizaciones políticas que rechazan el régimen impuesto mediante el golpe cívico, policial y militar encabezado por Mesa y Camacho, y culminado por Añez.
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