El Partido Comunista Brasileño se presento por fuera de la alianza que lidera Lula, hasta el momento ha obtenido 45.228 votos con el 98,54% de los sufragios contados. Tras conocerse los resultados lanzo un comunicado anunciando que votaran por Lula en una segunda vuelta y siguen apostando por construir poder popular en las luchas. Compartimos el comunicado.
2 de octubre de 2022 | 22:11
La Comisión Política Nacional del Comité Central del Partido Comunista Brasileño (PCB) agradece los miles de votos emitidos en nuestras candidaturas: compañera Sofia Manzano y Antônio Alves, para presidente y vicepresidente; en nuestros candidatos a los gobiernos estatales y también para nuestra candidatura al Senado, a la Cámara Federal ya las Asambleas Legislativas estatales. ¡Son votos que demuestran la disposición para las intensas luchas que enfrentará la clase obrera brasileña, en la dura batalla por la construcción del Poder Popular en dirección al socialismo!
El CPN saluda a toda la militancia del PCB y sus Colectivos de todas las regiones del país por el entusiasmo militante mostrado a lo largo de este proceso electoral. A lo largo de la campaña, nuestra militancia estuvo en diálogo con los trabajadores, la juventud y el pueblo pobre brasileño y propagando nuestro programa anticapitalista y antiimperialista, demostrando una vez más toda la organización, determinación y combatividad propias de la militancia comunista.
El período previo a la primera vuelta de las elecciones presidenciales de 2022 estuvo marcado por una enorme polarización entre los dos candidatos favoritos en las encuestas. Aún sin tiempo de TV y radio y sin los recursos del Fondo Especial, que tenían todos los demás partidos, hicimos una campaña histórica, dando voz a propuestas como la derogatoria de las contrarreformas; el fin del tope de gasto y la Ley de Responsabilidad Fiscal y la creación de la Ley de Responsabilidad Social; la cancelación de privatizaciones; la defensa de un programa de emergencia para acabar con el desempleo, el sinhogarismo, el hambre y la miseria, así como la reducción de la jornada laboral a 30 horas semanales sin reducción de salarios; la confiscación de todas las propiedades rurales y urbanas ociosas o irregulares sin compensación; reforma agraria popular y lucha contra el agronegocio;
Creemos que nuestro crecimiento antes y durante este proceso, así como la visibilidad alcanzada en estas elecciones por las ideas revolucionarias –que aún tienen amplias masas por conquistar, pero sin duda tuvieron una mayor difusión que en procesos electorales anteriores– confirman plenamente la importancia y el necesidad de candidaturas comunistas, que presenten un programa a favor de la independencia y la lucha de la clase obrera. El Partido Comunista Brasileño (PCB) tiene mucho trabajo por delante, pero la práctica demuestra que estamos en el camino correcto, de fortalecimiento y arraigo político dentro de la clase obrera, la juventud y los movimientos populares.
Cerrada la primera vuelta electoral, cesa también la posibilidad de presentar un programa proletario independiente. Ahora, las amplias masas del pueblo brasileño se verán obligadas a elegir entre dos proyectos, ninguno de ellos comunista. El PCB se posiciona claramente en esta segunda vuelta: votando por Lula para derrotar a Bolsonaro. Estamos absolutamente convencidos de que la profundidad de la crisis que estamos viviendo no se puede resolver buscando conciliar los intereses de la burguesía con los de los trabajadores, como propone la candidatura del PT. Sabemos que, aunque derrotado electoralmente, el bolsonarismo no desaparecerá de escena, seguirá siendo una amenaza política para la clase trabajadora en los próximos años, mientras no sea desarmado y aplastado.
La respuesta a esta crisis es la construcción del Poder Popular y la implementación de un programa anticapitalista y antiimperialista, tarea a la que el PCB y nuestra militancia organizada y combativa se dedicarán en todo momento en el próximo período, pase lo que pase. . Sin embargo, no tenemos la menor duda de que, desde el punto de vista de la clase obrera, existen profundas diferencias entre un gobierno burgués social-liberal y un gobierno burgués reaccionario; entre un gobierno que intenta reconciliar a la burguesía y el proletariado, y un gobierno que coquetea con el fascismo y está firmemente unido a la burguesía en torno a los ataques a la clase obrera y al pueblo pobre, como es el gobierno de Bolsonaro.
Sabemos que la crisis orgánica en la que estamos metidos, con unos 15 millones de trabajadores desempleados (si sumamos el paro oficial con el paro encubierto), unos 36 millones viviendo en la informalidad y más de 33 millones en colas de hambre pugnando por huesos y carne en los vertederos, no se resolverán mediante conciliación de clases. Sobre todo porque la dramática situación que vivimos es resultado de las políticas neoliberales implementadas por sucesivos gobiernos burgueses en las últimas cuatro décadas, todas ellas en favor de las clases dominantes, cómplices de esta tragedia social, económica y política. Por tanto, sólo un frente anticapitalista y antiimperialista con un programa de transformaciones sociales podrá resolver esta crisis.
También sabemos que la lucha no acaba con el recuento de las urnas. Los próximos meses estarán marcados por provocaciones fascistas, e incluso por una eventual aventura golpista, no solo durante la campaña electoral, sino hasta que asuma el nuevo gobierno. De esta forma, nuestra militancia debe estar preparada para cualquier situación que la coyuntura nos pueda imponer. Seguiremos luchando en las calles, en el trabajo, el estudio y la vivienda, buscando organizar a los trabajadores, jóvenes y pobres de nuestro país con miras a romper con este perverso modelo económico y social, en defensa del poder popular. del socialismo El Comité Central se reunirá en los próximos días para realizar un debate más profundo sobre la situación y posteriormente presentar nuevas pautas de militancia.
Comisión Política Nacional del Comité Central del PCB 02/10/2022
Fuente: PCB.
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