El joven Facundo Escalso tenía 17 años y murió este miércoles por un tiro en el pecho en lo que al parecer se trataría de un nuevo caso de gatillo de fácil por parte de la Gendarmeria.
18 de junio de 2020 | 11:05
En la noche de este miércoles la Agencia Télam compartía la noticia, en uno de sus cables, de un joven muerto en el Bajo Flores, con fuentes de la versión policial. Según la versión policial, “un joven de 20 años murió baleado esta tarde luego de un tiroteo con efectivos de la Gendarmería Nacional Argentina (GNA) en el interior del Barrio Rivadavia de la Ciudad de Buenos Aires”.
Ademas, las versiones policiales aseguran que “todo comenzó cuando oficiales de la Comisaría Vecinal 7A de la Policía de la Ciudad recibieron un alerta que daba cuenta sobre un enfrentamiento armado entre miembros de la GNA y dos personas en la esquina de Alfonsina Storni y Pasaje Roldán, en dicho barrio ubicado en la zona del denominado ‘Bajo Flores’”.
“Voceros policiales informaron que al acudir al lugar, los uniformados hallaron a un joven que había fallecido como producto del tiroteo con agentes de la mencionada fuerza de seguridad”, agrega el cable de Télam.
Sin embargo, los vecinos del barrio Rivadavia filmaron vídeos donde se habla de otra cosa. En los vídeos, que subió La Izquierda Diario, no solo se escuchan llantos de quienes conocen a la víctima sino bronca contra las decenas de gendarmes que armaban un cordón para autoprotegerse. Quienes conocían a Escalso aseguran que no tenía 20 años sino 17. También se ve la desesperación del vecindario porque se haga algo rápido con el joven agonizante mientras Gendarmería intenta callar a los vecinos.
En estos registros incluso se escuchan nuevas ráfagas de disparos de esa fuerza apenas segundos después de que el cuerpo de Facundo Escalso fuera subido a una ambulancia del SAME (que aseguran testigos demoró mucho en llegar).
En el Juzgado Criminal y Correccional 55, a cargo de la jueza Alejandra Allaud, se abrió una causa penal por “averiguación de causal de muerte”. Para “investigar” el caso se dispuso la intervención de la Policía de la Ciudad. La jueza Allaud también ordenó que la Unidad Criminalística Móvil realice las pericias correspondientes en el lugar de los hechos “mientras se intentaban determinar los motivos que derivaron en el tiroteo”. De esta manera, se demostró que las versiones policiales ya son poco creíbles.
Desde el conocimiento de las versiones de los vecinos hasta el momento, ni el Ministerio de Seguridad de la Nación ha publicado información oficial que amplíe sobre el caso que conmueve al Barrio Rivadavia. Tampoco Telam ha dado mayor información sobre lo ocurrido, mas allá de compartir las versiones policiales.
Los casos de gatillo fácil a manos de policías (federales y provinciales), gendarmes y prefectos y de violencia estatal en general se multiplican al calor de las políticas represivas ejecutadas por los gobiernos nacional de las provincias.
Con información de La Izquierda Diario.
תגובות