Los comunistas suecos repudiaron la decisión del Partido Socialdemocrata de ingresar a la OTAN y recuerdan que al aceptar la adhesión de Suecia a la alianza imperialista del Atlántico Norte, los socialdemócratas violan las decisiones de su propio Congreso.
16 de mayo de 2022 | 12:28
El Partido Comunista de Suecia (SKP) condena la decisión del gobernante Partido Socialdemócrata de respaldar la membresía del país en la OTAN . En un comentario publicado en el boletín oficial de SKP “ Riktpunkt ”, los comunistas recuerdan que al aceptar la adhesión de Suecia a la alianza imperialista del Atlántico Norte, los socialdemócratas violan las decisiones de su propio Congreso.
El domingo, la primera ministra sueca, Magdalena Andersson, anunció que Estocolmo buscará un amplio apoyo para una solicitud para unirse a la OTAN, luego de que su partido abandonara su oposición de larga data a la membresía.
SKP recuerda que en noviembre de 2021, el Congreso del Partido Socialdemócrata incluyó la siguiente referencia:
“La no alineación militar es una base de la política de seguridad de Suecia y, junto con nuestras mayores capacidades militares y la profundización de la cooperación internacional, contribuye a seguridad y estabilidad en nuestro vecindario. Nos da la libertad de actuar de la mejor manera que sirva a la distensión, al desarrollo pacífico y asegure nuestra independencia en política exterior. Por lo tanto, Suecia no debería unirse a la OTAN”.
El Partido Comunista subraya que este cambio de política de los socialdemócratas está relacionado con las aspiraciones del capital sueco de asegurar su esfera de interés y defender sus inversiones en el extranjero. “Es inevitable que las contradicciones dentro de todo el sistema capitalista-imperialista se intensifiquen y los capitales de cada país busquen las inversiones más rentables y las mejores condiciones para su crecimiento”, señala el SKP.
El Partido Comunista agrega: “Por supuesto, la situación de la política de seguridad ha cambiado. Las inversiones suecas en el exterior están ahora más amenazadas que hace 10 años porque las contradicciones se han agudizado. Por eso los políticos suecos actúan para defender sus propias inversiones y no pueden hacerlo solos. Entonces, es bastante simple: cuando el capital llama, las decisiones del Congreso no significan nada”.
Fuente: In Defense of Communism.
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